Un No Manifiesto disca porque reconoce que no puede hablar por todxs, sin embargo convoca a todxs aquellxs discas que tengan algo que agregar, reclamar, exigir o simplemente expresar.
Meteorita señala capacitismo de las actividades artivistas y de disidencia que no contempla a lxs discas. Pone de manifiesto una enorme fuerza de resistencia a la necropolítica.
Un grupo de “señoras sentadas” que no pertenecen al ejército de erguidos. Mujeres que coexisten y viven con enfermedades discapacitantes, crónicas y autoinmunes.
Meteorita son mujeres creativas, escritoras, autoras. En onfinamiento obligatorio debido a sus comorbilidades, pero que virtualmente se reunen a pensar y cuestionar, como Hedva ¿Cómo se rompe el cristal de un banco con un ladrillo cuando no puedes siquiera salir de la cama?
Meteorita se inscribe como la verdadera resistencia, una resistencia creativa ejercida con cuerpos y mentes que no le sirven al sistema y en cambio sí, muchísimo a la resistencia. Porque la discapacidad es un saber, un saber comunitario que se entreteje. Un saber cuidar la vida, la más frágil, la de ellas.
Descarga el No Manifiesto de Meteorita para leer en línea, o puedes escucharlo aquí:
Meteorita
Colectiva que busca visibilizar la falta de accesibilidad de las personas con discapacidad, enfermedades crónicas o neurodivergencia a los espacios comunes de “disidencia”.
Señalamos el capacitismo de las actividades artivistas y de disidencia que no nos contemplan. Somos una enorme fuerza de resistencia a la necropolítica. Por medio de un performance literario nos ponemos en el centro del espacio (literalmente) para ser vistas y escuchadas, para evidenciar nuestra resistencia vuelta cuerpo.
A nosotras ninguna disidencia nos contempla, nos da accesibilidad, nos nombra, debemos enfrentar el hecho de que muchas de las personas a las cuales estas disidencias intentan representar, no pueden participar en ellas, lo que significa que no pueden ser visibles como activistas políticos.
Somos creativas, escritoras, autoras. Estamos en confinamiento obligatorio debido a nuestras comorbilidades, pero llevamos un año reuniéndonos virtualmente, compartiéndonos, escribiendo, creando. Preguntándonos, como Hedva ¿Cómo se rompe el cristal de un banco con un ladrillo cuando no puedes siquiera salir de la cama?
Requerimos de múltiples y variados apoyos, andaderas, sillas de ruedas, jeringas de insulina,concentradores de oxígeno, pastillas psiquiátricas... Hemos devenido en Ciborgs. Y así, ciborgs queremos irrumpir (sí, irrumpir) con nuestras vida disca, nuestra palabra, nuestro performance de cuerpas discas que todas las disidencias invisibilizan.
Pero sabemos que somos la verdadera resistencia, una resistencia creativa ejercida con cuerpos y mentes que no le sirven al sistema y en cambio sí, muchísimo a la resistencia. Porque la discapacidad es un saber, un saber comunitario que se entreteje contra el sistema que nos quiere muertas. Un saber hacerle frente a la eugenesia y el capacitismo. Un saber cuidar la vida, la más frágil, la nuestra. La resistencia corporal encarnada, y la entrega al habitarse toda disca y hastiada de tanto, es rabia mutante en potencia. Nutrirse en el caos: pura transformación. Por una disidencia donde cuando se diga Todas(es), seamos en verdad Todas (es), no importa si eso implica cambiar las estrategias, aminorar el paso o adaptarse.